Semana Santa en familia

01de abril de 2021, San Francisquito, Qro.

La Voz del Párroco, Boletín Parroquial Missio, n.48

Hoy más que nunca, el papel de la Familia como Iglesia doméstica o Iglesia en casa, ha sido fundamental en la situación actual de pandemia que vivimos.

El “quedarse en casa”, ha sido todo un reto para las familias, ya que esta pandemia nos ha puesto a prueba, ya sea para sacar lo mejor o lo peor de cada uno; pero como familias cristianas vemos esto, como una oportunidad para revalorar y contemplar la belleza de la familia, en todo los sentidos, sobre todo frente a los grandes retos de salud, economía, educación, fe, etc.

Como pequeñas Iglesias en casa, hoy más que nunca, estamos llamados a vivir sobre todo nuestra fe, como fuerza de Dios, que nos sostiene para enfrentar no solo la pandemia, sino todas sus consecuencias.

Es el momento de hacer trascender el papel de la familia como Iglesia en casa, esto no es una novedad, pues la Iglesia ha insistido repetidamente que la “Familia, es la Iglesia doméstica”, aunque muchas de las veces no se era consciente de esta verdad, y se reducía la fe y la participación cristiana a nuestra parroquia o al templo de nuestra comunidad (en el mejor de los casos), pero no desde nuestra casa.

Hoy, la vida parroquial, encuentra su fuerza en el seno de cada familia, desde donde se vive el encuentro con Jesús, desde donde los papás, primeros evangelizadores y catequistas acompañan a sus hijos en su camino de fe; hoy desde el hogar, se vive la oración, se celebra la eucaristía virtualmente, se vive la caridad, sobre todo en el cuidado de la salud, en la atención a sus enfermos, en la solidaridad con los más necesitados.

Desde la Parroquia, “casa entre las casas”, con las familias, desde sus templos familiares, estamos llamados a hacer brillar la luz de Cristo, sobre todo en esta Semana Santa. Que cada familia, frente a esta pandemia, se levante victoriosa y resucite. 

Por eso quiero invitarlos desde la Parroquia a vivir con intensidad y alegría estos días santos, y que a pesar de las condiciones de pandemia, podamos reavivar nuestra fe y resucitar con Jesucristo. Vivamos la semana santa como Iglesia, como parroquia, desde nuestras familias, santuarios de vida, Iglesias domésticas, Iglesias en casa. 

Pbro. Lic. Saúl Ragoitia Vega