viernes, 1 de septiembre de 2017

“Dejen que los niños vengan a mi”

Con motivo de la Fiesta Patronal en honor a la Divina Pastora

01 de septiembre de  2017, San Francisquito, Querétaro.

La Voz del Párroco, Boletín Parroquial Missio, n.16


Queridas familias me dirijo a ustedes para invitarlos a celebrar con gran alegría nuestra Fiesta Patronal en honor a la Divina Pastora, oportunidad para para honrar y dar gloria a Dios de la mano de la Virgen María en esta hermosa advocación. La Fiesta es una oportunidad para que comunidad reavivemos nuestra fe y fortalezcamos nuestra manera de vivir en el barrio como verdaderos cristianos, discípulos de Jesús, dando testimonio de los valores del Evangelio.

En primer lugar, acrecienta nuestra fe, a través de la devoción, el novenario, el rezo del santo rosario, las procesiones, y sobre todo la santa Eucaristía, que es el centro de todo.

Nuestras tradiciones se ven fortalecidas, llenas de color, música de banda, expresiones culturales, flor y canto, danza de nuestros hermanos concheros, adorno de calles, el gallo, pirotecnia. Tradición que pone de manifiesto nuestra cultura a partir del hecho religioso y que es expresión de la vida del barrio, de los anhelos y esperanzas de nuestras familias, de nuestra identidad y amor que proclamamos cuando cantamos “Él es Dios”.

Es un acontecimiento solidario, donde se unen talenos, promueve la comunidad uniéndola por su tradiciones, como expresión del amor a la Virgen María, donde se colabora, se aporta lo mejor de sí, se “coopera para la fiesta”.

La fiesta patronal brilla con gran intensidad en medio de la ciudad, de nuestra urbe, de la modernidad de sus edificios y avenidas, y nos recuerda nuestras raíces, pone en evidencia los cimientos de la ciudad, que para algunos parecieran estar endebles, pero para nosotros, son tan fuertes, que son capaces de conjugar lo “moderno” y lo “antiguo”, la fe y la razón, la tradición y lo nuevo.

Al celebrar nuestra fiesta patronal, estamos actualizando nuestra cosmovisión y escribiendo nuestra historia como herencia a los mas jóvenes, por eso hemos querido hacer de la expresión de Jesús “dejan que los niños vengan a mi…” como la inspiración para nuestra fiesta. En efecto, que nuestros niños conozcan su raíces, sus tradiciones, y sobre todo su fe; que conozcan a Dios a través de sus fiestas patronales y de sus tradiciones, y que el día de mañana, sean no solo los que conserven y trasmitan a las generaciones esta tradiciones, sino sobre todo como hombres y mujeres de fe, sean la nueva generación transformadora de una mejor sociedad.


Pbro. Lic. Saúl Ragoitia Vega